El hockey es un deporte que trabaja tanto el tren superior como el inferior, por lo tanto favorece la coordinación del niño y la psicomotricidad. Necesita habilidad, destreza, velocidad, agilidad, fuerza,...
Ejercita la movilidad de las extremidades, mejora y desarrolla la capacidad de coordinación y el equilibrio. Estimula la capacidad del niño de reaccionar y mejora la percepción óculo-manual.
En cualquier lugar podemos preparar una portería y con cualquier cosa, como un palo o una escoba, podemos ponernos a jugar al hockey, seguro que los niños se divierten mucho y además mejoran sus habilidades motrices.